Existe una psicología del color y los colores juegan un papel importante en el branding
Una vez que decidí el nombre, el reto era pensar como ilustrar la idea de manera que reflejara la razón de ser del proyecto, por lo que los colores si o si debían mostrar la personalidad de la marca.
Cuando elegía la gama de colores de Miss Express, tenía claro que dos colores que quería que estuviesen presentes eran el rosa y el púrpura, porque son colores que históricamente la mercadotecnia ha usado para conectar con el publico femenino. Al comienzo eso también me generó un poco de dudas, porque si la necesidad surgió para cambiar una visión de comercios y mercados con segregaciones laborales históricas, era como hacer lo mismo. Entonces, me puse a pensar qué colores podría usar y entonces decidí, que ya que iba ser mi primera marca por registrar y representaba una vivencia personal, que mejor idea que usar mi color preferido, ya que también es algo personal y fue así, como establecí el verde tipo lima y manzana, pero sucedió que al combinarlo con los otros dos colores que había escogido inicialmente vi que combinaban muy bien.
La combinación de los tres colores de la marca me gustó mucho, pero como aún no estaba segura, solo estaba generando ideas dejé la paleta hecha y seguí con otras cosas. Tiempo después vi que esa combinación tricolor se estaba poniendo de moda por algunos diseñadores de moda, vi imágenes de vestuario y vi que efecto, son colores que combinan muy bien, así que dejé de hacerle caso a esa voz del síndrome del impostor que a veces se me aparece cuando tengo una idea que nunca he experimentado.
Hice muchos experimentos de diseños imágenes para tener una idea de cómo se vería y aún así me siguió encantando la idea, reflejaba alegría, armonía, diversión, juventud y me gusta que la marca refleje eso, porque irradia el espíritu de la innovación. Al menos la psicología del color menciona que el rosa refleja feminidad, el púrpura misticismo y el verde esperanza, equilibrio, armonía, ecología. La psicología del color debería hablar más de las mezclas, que de los colores en específico, porque individualmente quizás no se parece la comparación, pero vaya que juntos provocan otro conjunto de emociones.
Al final retomé mi paleta de colores inicial y dije ¡me la quedo! Y si alguna persona me formula el primer cuestionamiento que tuve en los inicios de mi elección, lo respeto pero ante mi satisfacción visual de lo que subjetivamente considero bello, ya no hay inseguridad alguna. Incluso cuando fui a registrar la marca me dijeron que podía hacerlo en blanco y negro, por si quiero cambiar de parecer a futuro, pero la registré con estos colores.